Exposición “La Amenaza”, un atentado fallido de ETA en imágenes, hasta el 1 de octubre en el Memorial
El Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo inauguró el 6 de julio, la exposición del fotógrafo José Luis Nocito, quien desarrolló su carrera profesional en el diario El Correo. En el acto de inauguración tomaron parte Florencio Domínguez, director del Memorial; José Miguel Santamaría, director del diario bilbaíno El Correo, Olatz Barriuso, periodista, y José Luis Nocito.
Florencio Domínguez puso especial énfasis en 2002, el año del atentado fallido registrado en la muestra. Un año en el que la banda terrorista ETA “se centró en objetivos económicos” y que sería el preámbulo definitivo del final de la banda. La corresponsal política de El Correo, Olatz Barriuso, autora de la crónica de aquel atentado frustrado, destacó que “ésta es una nueva ocasión para reivindicar la resistencia de tantos y tantos ciudadanos, vascos de a pie, que dieron la cara frente al terror con ese acto sencillo de levantarse cada mañana para ir a trabajar”. Se mostró sorprendida de no tener recuerdos de aquella bomba “en un tiempo en que había tantas”. Era la extraña normalidad de una sociedad habituada al sobresalto y la tragedia, algo que queda reflejado también en la exposición.
El director del diario decano de la prensa vasca, José Miguel Santamaría comenzó resaltando “la sensibilidad y tenacidad” de José Luis Nocito. Para Santamaría, la exposición es como “un homenaje a todos los fotógrafos que en aquellos años estuvieron en primera línea. Eran ellos quienes llegaban, muchas veces antes que la Policía, los que se encontraban aquellos escenarios terribles y los que resistían en las manifestaciones sin dar un paso atrás”. A juicio de Santamaría, “su trabajo es una parte fundamental del relato. Las imágenes que tomaron en aquellos años y que hoy llenan el Memorial retratan aquellos años, desde el rostro de Ortega Lara el día de su liberación a la angustia de la familia de Miguel Ángel Blanco en el balcón de Ermua”. Por último, José Luis Nocito confesó que “esta es una historia de unas horas en que realmente no pasa nada, porque aquella bomba no estalló. Pero refleja unos años de mucha inquietud y mucho dolor. Ojalá todo hubiese sido un mal sueño”. Nocito lo resume todo en “un bucle de dos horas y media, en 50 metros de distancia” donde “todo empieza y acaba igual”.
“La amenaza” concentra dos horas y media de vivencias, sentimientos y emociones en 12 impactantes imágenes que José Luis Nocito tomó en las calles de Bilbao, el 4 de marzo de 2002. Aquel lunes, sobre las 7:50 de la mañana, familiares del histórico exsecretario general del sindicato Unión General de Trabajadores (UGT) y militante del PSOE, Nicolás Redondo Urbieta, encontraron un paquete sospechoso en la escalera de su domicilio en la localidad vizcaína de Portugalete. Era una olla a presión precintada que tenía en su interior una bombona de camping gas sin detonador. Pretendía provocar más presión ambiental y miedo, después del intento de asesinato de Esther Cabezudo, teniente de alcalde del consistorio portugalujo con el PSE-EE, y de su escolta.
Aquel día a las 10:30 horas, la Asociación de Ayuda en Carretera DYA y la sede del periódico Gara reciben una llamada comunicando la colocación de una bomba con 21 kilos de explosivo en los servicios, situados junto a depósitos de gasóleo, del edificio de la Bolsa de Bilbao. La Ertzaintza acordonó la zona impidiendo el paso de vehículos y peatones, y se desalojaron las estaciones de tren y metro, academias, bancos, empresas y comercios. En la calle, todos esperaban resignados: durante 150 minutos el centro de Bilbao se paralizó, temiendo que la carga explosiva estallase. De la angustia, inquietud y el miedo inicial, se pasó al aburrimiento, al hartazgo, esperando que la Ertzaintza abriera el cordón de seguridad. Afortunadamente, el detonador no activó los 21 kilos de explosivo que contenía la bomba. Cuando después de dos horas y media el paisaje urbano recobró la actividad, la gente corría, liberándose de la tensión e intentando recuperar el tiempo perdido.
La muestra incluye textos inéditos creados para las fotografías expuestas por conocidos autores, escritores y periodistas como Bernardo Atxaga, Kirmen Uribe y Olatz Barriuso, entre otros, además de un audiovisual musicado con una selección de 60 fotografías publicadas en prensa por José Luis Nocito, desde finales de los años setenta hasta 2000. Aparece, entre otros momentos, la emboscada de ETA a la Guardia Civil en Ispáster en 1980, atentados de ETA y GAL, así como el ambiente que rodeaba al terrorismo callejero.
La exposición estará abierta al público en el Memorial, entre el 6 de julio y el 1 de octubre de 2023, en los horarios del Museo.
Créditos
Javier V. Calderón. Música y realización del video.
Estudios Durero. Digitalización, tratamiento e impresión de imágenes.
Habemus Estudio. Diseño museográfico.
Oketa. Producción y montaje de sala.
Aritz Gorrotxategi. Traducción al euskera.
José Luis Nocito. Fotografía y comisario de la exposición.
Textos / Testuen egileak
Bernardo Atxaga
Olatz Barriuso
Antonio Basagoiti
Fernando Iturribarría
José Luis Nocito
Kirmen Uribe
